junio 24, 2010

Tío Dary



Cuando un amigo se va 









Cuando un amigo se va
queda un espacio vacío,
que no lo puede llenar
la llegada de otro amigo...
Cuando un amigo se va,
queda un tizón encendido
que no se puede apagar
ni con las aguas de un río...
Cuando un amigo se va
una estrella se ha perdido
la que ilumina el lugar
donde hay un niño dormido...
Cuando un amigo se va
se detienen los caminos
y se empieza a revelar
el duende manso del vino...
Cuando un amigo se va
galopando su destino,
empieza el alma a vibrar
porque se llena de frío.
Cuando un amigo se va,
queda un terreno baldío
que quiere el tiempo llenar
con las piedras del hastío.

Cuando un amigo se va,
se queda un árbol caído
que ya no vuelve a brotar
porque el viento lo ha vencido.
Cuando un amigo se va,
queda un espacio vacío
que no lo puede llenar
la llegada de otro amigo!




DESCANSE EN PAZ MI AMIGO DARIO HERRERA



junio 16, 2010

LA EDUCACIÓN ES EL CAMINO





Vale la pena leer el discurso de el Sr. Mujica, se los comparto y espero su opinión.




Dijo José Mujica (Presidente de Uruguay):




Ustedes saben mejor que nadie que en el conocimiento y la cultura no sólo hay esfuerzo sino también placer.


Dicen que la gente que trota por la rambla, llega un punto en el que entra en una especie de éxtasis donde ya no existe el cansancio y sólo le queda el placer.


Creo que con el conocimiento y la cultura pasa lo mismo. Llega un punto donde estudiar, o investigar, o aprender, ya no es un esfuerzo y es puro disfrute.


¡Qué bueno sería que estos manjares estuvieran a disposición de mucha gente!


Qué bueno sería, si en la canasta de la calidad de la vida que el Uruguay puede ofrecer a su gente, hubiera una buena cantidad de consumos intelectuales.


No porque sea elegante sino porque es placentero.


Porque se disfruta, con la misma intensidad con la que se puede disfrutar un plato de tallarines.
¡No hay una lista obligatoria de las cosas que nos hacen felices!


Algunos pueden pensar que el mundo ideal es un lugar repleto de shoppingcenters.


En ese mundo la gente es feliz porque todos pueden salir llenos de bolsas de ropa nueva y de cajas de electrodomésticos.


No tengo nada contra esa visión, sólo digo que no es la única posible.


Digo que también podemos pensar en un país donde la gente elige arreglar las cosas en lugar de tirarlas, elige un auto chico en lugar de un auto grande, elige abrigarse en lugar de subir la calefacción.


Despilfarrar no es lo que hacen las sociedades más maduras. Vayan a Holanda y vean las ciudades repletas de bicicletas. Allí se van a dar cuenta de que el consumismo no es la elección de la verdadera aristocracia de la humanidad. Es la elección de los noveleros y los frívolos.


Los holandeses andan en bicicleta, las usan para ir a trabajar pero también para ir a los conciertos o a los parques.


Porque han llegado a un nivel en el que su felicidad cotidiana se alimenta tanto de consumos materiales como intelectuales.


Así que amigos, vayan y contagien el placer por el conocimiento.


En paralelo, mi modesta contribución va a ser tratar de que los uruguayos anden de bicicleteada en bicicleteada.




LA EDUCACION ES EL CAMINO


Y amigos, el puente entre este hoy y ese mañana que queremos tiene un nombre y se llama educación.


Y mire que es un puente largo y difícil de cruzar.


Porque una cosa es la retórica de la educación y otra cosa es que nos decidamos a hacer los sacrificios que implica lanzar un gran esfuerzo educativo y sostenerlo en el tiempo.


Las inversiones en educación son de rendimiento lento, no le lucen a ningún gobierno, movilizan resistencias y obligan a postergar otras demandas.


Pero hay que hacerlo.
Se lo debemos a nuestros hijos y nietos.


Y hay que hacerlo ahora, cuando todavía está fresco el milagro tecnológico de Internet y se abren oportunidades nunca vistas de acceso al conocimiento.


Yo me crié con la radio, vi nacer la televisión, después la televisión en colores, después las transmisiones por satélite.


Después resultó que en mi televisor aparecían cuarenta canales, incluidos los que trasmitían en directo desde Estados Unidos, España e Italia.


Después los celulares y después la computadora, que al principio sólo servía para procesar números.


Cada una de esas veces, me quedé con la boca abierta.


Pero ahora con Internet se me agotó la capacidad de sorpresa.


Me siento como aquellos humanos que vieron una rueda por primera vez.


O como los que vieron el fuego por primera vez.


Uno siente que le tocó en suerte vivir un hito en la historia.


Se están abriendo las puertas de todas las bibliotecas y de todos los museos; van a estar a disposición, todas las revistas científicas y todos los libros del mundo.


Y probablemente todas las películas y todas las músicas del mundo.


Es abrumador.


Por eso necesitamos que todos los uruguayos y sobre todo los uruguayitos sepan nadar en ese torrente.


Hay que subirse a esa corriente y navegar en ella como pez en el agua.


Lo conseguiremos si está sólida esa matriz intelectual de la que hablábamos antes.


Si nuestros chiquilines saben razonar en orden y saben hacerse las preguntas que valen la pena.


Es como una carrera en dos pistas, allá arriba en el mundo el océano de información, acá abajo preparándonos para la navegación trasatlántica.


Escuelas de tiempo completo, facultades en el interior, enseñanza terciaria masificada.


Y probablemente, inglés desde el preescolar en la enseñanza pública.


Porque el inglés no es el idioma que hablan los yanquis, es el idioma con el que los chinos se entienden con el mundo.


No podemos estar afuera. No podemos dejar afuera a nuestros chiquilines.


Esas son las herramientas que nos habilitan a interactuar con la explosión universal del conocimiento.


Este mundo nuevo no nos simplifica la vida, nos la complica.


Nos obliga a ir más lejos y más hondo en la educación.


No hay tarea más grande delante de nosotros.





junio 01, 2010

El reflejo de tus actos


El reflejo de tus actos

Se dice por ahí que hace tiempo, en un pequeño y lejano pueblo, había una casa abandonada. 
Cierto día, un perrito buscando refugio del sol logró meterse por un agujero de una de las puertas de dicha casa, el perrito subió lentamente las viejas escaleras de madera; al terminar de subir las escaleras se topó con una puerta semi-abierta.

Lentamente se adentró en el cuarto y para su sorpresa se dio cuenta que dentro de ese cuarto había 1000 perritos más observándolo tan fijamente como él los observaba a ellos.
El perrito comenzó a mover la cola y a levantar sus orejas poco a poco, los 1000 perritos hicieron lo mismo; posteriormente sonrió y le ladró alegremente a uno de ellos, el perrito se quedó sorprendido al ver que los 1000 perritos también le sonreían y ladraban alegremente con él. 
Cuando el perrito salió del cuarto se quedó pensando para si mismo:


"Qué lugar tan agradable, voy a venir más seguido a visitarlo".


Tiempo después, otro perrito callejero entró al mismo sitio y se encontró en el mismo cuarto, pero a diferencia del primero, este perrito al ver a los otros 1000 perritos del cuarto se sintió amenazado ya que, a su parecer, lo estaban viendo de una manera agresiva, éste empezó a gruñir y obviamente vio como los 1000 perritos le gruñían a él.
Comenzó a ladrarles ferozmente y los otros 1000 perritos le ladraron también a él; cuando este perrito salió del cuarto pensó:


"Qué lugar tan horrible es este, nunca mas volveré a entrar allí".


En el frente de dicha casa se encontraba un viejo letrero que decía:


"La casa de los 1000 espejos".



“No eres responsable de la cara que tienes, pero si eres responsable de la cara que pones.”

Todos los rostros del mundo son espejos…
Decide cual rostro llevaras por dentro y ese será el que mostraras a todos.
El reflejo de tus gestos y acciones es lo que proyectas ante los demás.

Las cosas más bellas del mundo no se ven ni se tocan, solo se sienten con el corazón.

Autor anónimo.